Fina Confitura de Fresa

2008-08-23

Mi segunda visita al servicio técnico de Nikon

Esta semana mi cámara ha hecho su segunda visita al servicio técnico de Nikon (que en Canarias lleva Tirsons, no Finicon). No, no es que la pobre haya vuelto a sufrir otra caída de mochila, sino que una pequeña comunidad de manchitas se estaba haciendo cada vez más visible en mis fotos, y el 18-200 había acumulado una considerable cantidad de polvo en su interior, que aunque no llegaba a molestar, si que empezaba a ser estéticamente preocupante.

Y sí, hay por la Red numerosas páginas que explican detalladamente como limpiar el sensor de la cámara, pero uno es bastante aprensivo con según que cosas, y desde luego no iba a meterle mano al objetivo, así que directo a Tirsons, que además me queda cerquita del curro.

Tuvieron la cámara cinco días, pero me dá que más porque se despistaron en llamarme que por el tiempo de la limpieza (el joven que me atendió me dijo que estaría en un día, quizás dos para el objetivo), y el resultado, impecable. No sólo limpiaron el sensor y el interior del objetivo, sino que le dieron un buen repaso al exterior (incluyendo el visor y el protector de la pantalla, que también estaban hechos un asquito), todo ello por 63 eurillos (31.5 por la cámara, y otros tantos por el objetivo). Además les pedí que me pegaran o cambiaran las camisas (las fundas de plástico que cubren la cámara y el anillo del zoom del objetivo, y que en la D200 tienen una molesta tendencia a despegarse justo debajo del botón de disparo), cosa que hicieron sin ningún coste.

Así que ahora tengo la cámara como nueva (me había olvidado lo brillantes que aparecen los colores con un visor limpio ;), y sigo encantado con el servicio técnico de Tirsons. Chapó.